Londres, 11 Ene (Notimex). El grupo sunista extremista Lashkar-e-Jhangvi se atribuyó la responsabilidad por un ataque contra los musulmanes chiitas en el suroeste de la ciudad paquistaní de Quetta.
En el marco de la serie de atentados en Quetta, el valle de Swat y la ciudad de Karachi que dejaron un saldo de al menos 125 muertos, el gobierno declaró tres días de duelo nacional.
El incidente más mortífero fue un doble atentado en un billar de un vecindario predominantemente chiita en la ciudad de Quetta, capital de la provincia de Baluchistán, cercana a la frontera con Afganistán.
Varios periodistas y personal de servicios de emergencia que acudieron a la escena del primer ataque fallecieron cuando una segunda bomba estalló en el lugar.
Al menos 92 personas murieron y otras 120 resultaron heridas en cuatro explosiones separadas en Quetta, que vive la violencia sectaria entre sunitas y chiitas.
Los hospitales y la morgue local se vieron desbordados por el número creciente de víctimas que llegaron a lo largo de la noche del jueves.
Baluchistán ha sido el escenario de un conflicto interno que casi cumple una década, entre un grupo rebelde regional que exige autonomía política y una mayor participación en la riqueza natural de la zona y el ejército paquistaní y las tropas locales.
En el valle Swat, al menos 25 personas murieron y otras 70 resultaron heridas tras una explosión en una reunión religiosa.
Los talibanes paquistaníes tomaron gran parte de Swat durante una campaña armada entre 2007-2009 , pero el ejército declaró haber recuperado el control tras una ofensiva en julio de 2009.
Además de las muertes en Quetta y Swat, nueve personas murieron en incidentes separados en en Karachi, la mayor ciudad de Pakistán y su centro comercial.
